CAMINO SANTIAGO PASANDO POR ALCALA DEL JUCAR
CAMINO DE SANTIAGO, Casas Rurales Río Júcar
Ruta Jacobea de la Lana:
Casas rurales Río Júcar se encuentran en un lugar cercano para poder realizar dos de los tramos de la Ruta Jacobea de la Lana.
Origen Histórico
Uno de los más antiguos trazados comerciales peninsulares. Recorre España desde el Levante a Santiago, pasando por las tierras interiores de Cuenca y Guadalajara, las del Alto Duero, Silos y Covarrubias, hasta llegar a Burgos. Son más de 400 kilómetros de grandes contrastes y de una tierra que habla de las correrías de Rodrigo Día de Vivar, El Cid,
La leyenda y la realidad histórica se entremezclan en esta vía al coincidir muchos tramos, en sentido inverso, con la senda de destierro del Cid.
En gran parte, este camino coincide con la ruta de la trashumancia que seguían los esquiladeros, ganaderos y comerciantes relacionados con la lana y sus derivados y que llevaba al gran productor de Castilla La Mancha hasta Burgos, capital comercial de este producto durante los siglos XVI y XVII.
La Ruta de la Lana parte de Alicante por anchos y cómodos caminos con abundancia de localidades que muestran el pasado musulmán de esta zona. El gran número de castillos que jalonan esta vía reviven históricos capítulos de las relaciones entre cristianos y musulmanes.
La Ruta de la Lana está bien señalizada en su totalidad y posee infraestructuras suficientes para el peregrino, con acogida o albergues en distintas localidades a lo largo del Camino
El Camino de Lana se vertebra en tierras conquenses, donde recoge diversas ramificaciones camineras manchegas propias del oficio del esquilador, que al sur entroncan con los caminos levantinos. Desde Cuenca recorre las provincias de Guadalajara, con enlace a su capital, Soria y Burgos, en cuya capital burgalesa entronca con el Camino de Santiago.
Desde puntos muy cercanos a casas rurales rio jucar se pueden hacer dos etapas de este tramo de camino de la ruta de la lana.
Etapa ES13a-08a.- De Alatoz a Casas Ibáñez ( 29,150 Km. )
Cruzamos la carretera CM-332 y caminamos por la calle del Arrabal para descender hacia el Barranco del Reventón, subimos tras salvarlo y en breve nuestro camino llega a una encrucijada en la que optamos por la pista de la izquierda , por la que seguimos de frente cuando unos metros más adelante aparezca un desvío por la izquierda. A menos de 500 metros un nuevo cruce, continuamos de frente y en la siguiente bifurcación tomamos por la derecha, descendiendo hacia la Cañada de la Gitana, tras vadearla accedemos al cortijo de la Gitana y, desde él, nos dirigimos hacia la carretera.
Descendemos junto a la carretera hacia la Sierra de la Caballa y accedemos a ella junto a la carretera, entre las Sierras de Peñarrubia y la de la Solana. Próximos a acercarnos a la carretera rebasamos una construcción y, tras ella, una pista que se dirige hacia la carretera, la tomamos, pero en dirección contraria, hacia la izquierda, descendiendo hacia el barranco del Corral del Cano, rodeando los cerros de la Sierra hasta alcanzar una finca, el Corral de Enrique donde nuestro camino, unos metros antes, se une a otro en el que tomamos la dirección de la derecha y por el que seguimos avanzando, en descenso, siempre por la pista principal, hasta llegar a Casas del Cerro, antes de entrar cruzamos la carretera CM-3254 y entramos al pueblo por la calle de San Isidro, hasta la Plaza de la Iglesia, por la calle del Sol Saliente nos acercamos al Mirador del Jucar y tomamos una senda que, en zig-zag, salva el brusco desnivel existente entre el pueblo de Casas del Cerro y el río Jucar. Junto al río, en ambas orillas se ubica Alcalá del Júcar que cuenta con todos los servicios.
Por el callejón de la Virgen accedemos a la orilla del río, la ubicación del pueblo, en la Hoz, vigilada por el Castillo que vislumbra a ambos lados del recodo es impagable y bien merece la pena dedicar un tiempo a recrear la vista, refrescar el cuerpo y recuperar fuerzas.
Cruzamos el río por el puente de piedra de la avenida de los Robles y remontamos, por no decir escalamos, las empinadas y hermosas calles de Alcalá cruzando por entre las Cuevas del Diablo y subiendo hasta la calle de Buenaire. Ya en la parte de arriba del pueblo sale un camino, por la izquierda que, recorriendo el cortante formado por el río, se dirige a Las Eras, el Camino bordea por las afueras del pueblo y busca unas naves industriales situadas tras la Estación de Servicio, saliendo por una pista que discurre apartada de la carretera CM-3201. Alcanzamos un circuito de Karts y el Camino continúa de frente, sin atender a ningún desvío hasta llegar a una bifurcación que se desvía para dirigirse, por la izquierda, al cercano pueblo de Serradiel, nuestro camino continua por la derecha, acercándose poco a poco a la carretera AB-880, pasamos junto al Cerro de San Jorge y, tras un impresionante huerto solar, cruzamos por un paso inferior la carretera nacional N-322 y entramos en Casas-Ibáñez por la carretera de Jorquera que, seguida por la calle de San Jorge nos deja en la Plaza de la Virgen de la Cabeza.
Etapa ES13a-09a.- De Casas Ibáñez a Villarta ( 26,490 Km. )
Situados en la Plaza de la Virgen de la Cabeza, junto a la de la Constitución salimos por la calle Correos hasta el agradable Paseo Cañada que recorremos hasta el final donde tomamos por la calle Santa Catalina para salir de la población por el Camino Viejo de Villamalea, entre unas naves. El camino, aunque alejado, discurre en paralelo a la CM-3201 durante un trecho hasta que, finalmente, se acerca a ella y la atravesamos para continuar avanzando desde su otro arcén.
El Camino se aleja perpendicularmente de la carretera, nosotros nos desviamos por una senda que sale por su derecha y que seguimos de frente, obviando cualquier desvío o cruce que nos aparezca hasta llegar a Villamalea.
Villamalea cuenta con todos los servicios. Entramos por la calle Balsa y continuamos por la calle Olmo hasta llegar al edificio de Correos, nos desviamos hacia la derecha, tomando la calle de las Cuatro Esquinas que nos deja en la Plaza de Alfonso XII, desde ella, por la calle Larga hasta el Pabellón Deportivo, que bordeamos, y salimos de la población, al final de las últimas casas veremos en frente, la plaza de toros, nosotros tomamos por la pista que sale por nuestra derecha, en subida, se trata del Camino Viejo del Herrumblar que, poco a poco, se va acercando a la carretera que discurre por nuestra derecha y a la que alcanza pocos metros antes de llegar al Herrumblar.
Cruzamos la carretera en su desvío de circunvalación y entramos en el Herrumblar, que cuenta con todos los servicios, por la calle Joya, paseamos por la calle Cuenca, la principal hasta que, casi al final de la población, aparece la calle Calvario, por la izquierda, la seguimos para salir del pueblo y tomar un camino que se dirige de nuevo hacia la carretera CM-3201, la atravesamos y continuamos subiendo hasta encontrar una bifurcación, tomamos a la derecha y seguimos ascendiendo hasta llegar al alto del Aterrado (786 mt.). Desde aquí un pronunciado descenso que se frena al llegar a la carretera y que bordeamos unos metros hasta cruzarla a la altura de la Rambla de la Canaleja.
Ya en la otra parte continuamos por una pista asfaltada que nos acerca a Villarta, a la que accedemos por el Paseo de la Alameda para buscar la Plaza de la Constitución.
Técnicas para caminar
Si tenemos costumbre, sobran los comentarios, pero para quien no la tenga, le indicamos que es conveniente, empezar suavemente, nunca con prisas, hasta que el cuerpo se caliente. Cuando se acelere, con marcha regular y continua, dentro de lo posible, con paso suave y rítmico.
También es conveniente antes de empezar a andar, realizar algunos estiramientos, especialmente de las piernas, colocándonos con las manos contra la pared, e ir apoyando paulatinamente toda la planta de los pies, hasta notar una cierta tensión detrás de las rodillas, a medida que el cuerpo se va acercando al suelo.
Mientras se camina hay que mantener siempre un paso que nos resulte cómodo, que nos permita sin ningún tipo de esfuerzo poder mantener una conversación. Caminar tiene que llegar a ser tan natural como respirar, que lo hagamos sin darnos cuenta.
Es muy posible que el propio Camino nos obligue a realizar paradas muy frecuentes, para ver algún monumento o iglesia, realizar cualquier pregunta, sacar alguna foto, etc., pero, en principio, deberíamos descansar cuando menos diez minutos cada hora o dos horas, o más si fuera necesario. No obstante, el mismo cuerpo, la climatología o cualquier otra circunstancia, nos lo indicará o pedirá.
En terreno llano, vayamos con nuestro paso normal, ni demasiado largo ni demasiado corto; en las subidas, puesto que no tenemos prisa, con más corto y lento, acaso aflojándonos el cinturón de la mochila para poder respirar mejor, y apoyando el pie con la totalidad de la planta en el suelo, para evitar sobrecargar determinadas zonas.
En las bajadas y siempre que el piso nos lo permita, con paso largo y rápido, clavando bien los tacones y quizás apretando un poco más la mochila a la cintura para que nos descansen los hombros.
Terminaremos dando sobre un millón de pasos, pero no tenemos que descuidar ninguno y ver dónde ponemos el pie; un solo paso mal dado nos puede obligar a retirarnos; por tanto, especialmente cuando vayamos por terrenos accidentados, de piedra suelta o guijarro, deberemos estar atentos al pisar.
Por supuesto, si vamos en compañía de alguien que tenga el paso más rápido, no debemos tratar de seguir su ritmo, pues en sólo unas horas, nos puede dejar destrozados; será conveniente, por tanto, que el que mas ande, se coloque el último y no marque el ritmo.
Es conveniente ayudarse tanto en las subidas como en las bajadas con el bordón, que, además, hace menos monótono el andar.